Porque necesitamos un cuerpo jurídico potente.

  • Los miembros han de sentirse unidos
  • La imagen colectiva ha de ser potente
  • Ha de tener identidad propia
  • El nombre ha de tener el sentido de lo que es

Necesitamos una Confederación Nacional de Agentes y Empresas inmobiliarias para fortalecer nuestras debilidades sectoriales, protegernos de ciertas amenazas, basarnos en nuestras fortalezas y no desaprovechar las oportunidades que ahora tenemos:

DEBILIDADES

  • Falta un interlocutor universal del sector inmobiliario.
  • Excesiva atomización de entidades representativas, locales y como mucho autonómicas.
  • Divergencia en objetivos prioritarios. Cada uno tiene su objetivo.
  • Falta de valentía para capitanear un liderazgo sectorial, que evidentemente no es fácil.
  • Complejo de ser una profesión de segunda y desprotegida.

AMENAZAS

  • Estamos proliferando en desorden y caóticamente, asociándonos sin ton ni son.
  • El consumidor está desprotegido de APIS poco formados.
  • Nuevos modelos de negocio 100 % digitales ocupan, al igual que lo han hecho en otros sectores, una parta del negocio de la intermediación inmobiliaria.  
  • Inmovilismo a actuar decididamente por miedos o comodidad.
  • Poco interés político en organizar el sector. Poco caso a los COAPIS y menos a las AIP y AIE.

FORTALEZAS

  • El sector inmobiliario representa el 13% del PNB.
  • Los COAPIS son la única red nacional presente en todas las provincias .
  • Los COAPIS están aun amparados por el Derecho Publico.
  • Juntos los COAPIS + AIP + AIE, podemos vertebrar el sector como ha ocurrido en otros países.

OPORTUNIDADES

  • En este momento se dan circunstancias muy favorables para la unión sectorial. Varias presidencias importantes coinciden.
  • Hay que aprovechar el momento de que todos tenemos ganas de unirnos y estar bien representados ante las administraciones.
  • Podemos mejorar la formación a nivel europeo y crear certificaciones de calidad, con Universidades y Escuelas con experiencia.
  • Las AIP y AIE locales no están aún organizadas en los altos niveles nacionales, y eso facilita la creación de una estructura nueva.
  • Hay más de 200 empresas de proptech que trabajan para poder mejorar día a día la intermediación con nuestros clientes y modernizar nuestros negocios.

En conclusión:
Estamos en un universo inmobiliario atomizado, disperso, disgregado, con derecho público, privado y sin regular, todo mezclado.
¡¡Tenemos que poner orden en todo esto!!